La terapia cognitivo-conductual es un tipo común de asesoramiento sobre salud mental (psicoterapia). Con la terapia cognitivo-conductual, se trabaja con un consejero de salud mental (psicoterapeuta o terapeuta) de forma estructurada, asistiendo a un número limitado de sesiones. La terapia cognitivo-conductual le ayuda a tomar conciencia de los pensamientos negativos o inexactos, para que pueda ver situaciones desafiantes con mayor claridad y responder a ellas de una manera más eficaz.
La terapia cognitivo-conductual puede ser una herramienta muy útil en el tratamiento de trastornos o enfermedades mentales, como la ansiedad o la depresión. Pero no todas las personas que se benefician de la terapia cognitivo-conductual tienen una enfermedad mental. Puede ser una herramienta eficaz para ayudar a cualquier persona a aprender cómo gestionar mejor las situaciones estresantes de la vida.
La terapia cognitivo-conductual se puede realizar individualmente o en grupos con miembros de la familia o con personas que tienen problemas similares.